Mermelada de chía y arándanos

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Esta receta es mi mermelada. Sólo requiere dos ingredientes simples y llenos de nutrientes: arándanos ricos en antioxidantes y semillas de chía, que contienen grasas omega-3. Es fácil de hacer y ligeramente dulce (¡no lleva azúcar añadido!). Soy adicto. Lo uso en todo, desde cubrir mis tostadas de la mañana hasta mezclarlo con avena y yogur... hasta usarlo como reemplazo de la gelatina azucarada comprada en la tienda en mi sándwich PB&J.

Prefiero los arándanos, pero este truco también funciona con frambuesas (las favoritas de Ian), moras y fresas en rodajas. ¡Siéntete libre de mezclar y combinar!

Asegúrese de utilizar un recipiente hondo apto para microondas. Si el molde es demasiado pequeño, el jugo de las bayas se derramará y ensuciará (¡he estado allí varias veces!).

• ½ taza colmada de arándanos, frescos o congelados • 2 cucharaditas de semillas de chía

Cocine los arándanos en el microondas durante unos 60 segundos para que se ablanden y dejen que se filtren los jugos naturales. Retirar del microondas (tenga cuidado, estará caliente) y triturar los trozos más grandes con un tenedor o el dorso de una cuchara. Esto ayudará a romper algunos de los trozos más grandes. Agregue las semillas de chía y déjelas reposar durante al menos 15 minutos para que se gelifiquen.

Guarde la mermelada en un recipiente hermético con tapa en el refrigerador hasta por 10 días.

Información nutricional proporcionada por cucharada.

Prueba mi mermelada de cereza y chía.